Ventajas del teléfono móvil
Desde que esta tecnología ha entrado a formar parte de nuestras vidas y de los que nos rodean hay un gesto que me incomoda mucho: que alguien se ponga a hablar distendidamente tras recibir una llamada cuando estoy a solas con él.
Una de las ventajas que tiene el teléfono móvil (debido a la interfaz pseudo-RDSI con su LAP-D si no recuerdo mal) es que puedes “colgar” sin llegar a “descolgar”. Esto, que parece una tontería, es muy útil. Hay que aprovechar esta posibilidad que no teníamos antes y establecer una nueva capacidad de comunicación por ello.
Cuando llamo a alguien y me cuelga antes de iniciar la comunicación recibo de forma inherente el mensaje de “ahora no puedo hablar, llama dentro de 15 minutos”; y creo que es lo que todo el mundo debería entender cuando pasa eso.
Hay que dar por supuesto un hecho: la gente no evita hablar conmigo sino que está ocupada. Y es que muchas personas se enfadan porque consideran un hecho violento que deneges hablar con ellos. Hay pocas personas que tengan mi número de teléfono y con las que no quiera hablar, por lo que la información inherente de la que hablaba en el segundo párrafo debe llegar a su destinatario.