Cada día nace el futuro de dentro de 50 años
Ayer nació aquella cuyo fin es ser Jefa del Estado Español. Sea esto lo que realmente acabe pasando o no, hay muchas dudas que se me plantean al pensar en un futuro a medio plazo. Por ejemplo, cuando la Princesa Leonor pase a ser Reina Leonor, pongamos año 2050.
¿Qué será España? Quizás nos sentiremos tan españoles como los habitantes de Asturias se sienten asturianos, y tan europeos como ahora nos sentimos españoles. Federico Luppi decía Martín Hache: “La patria es un invento (…) tu país son tus amigos”. Es ese un sentimiento comprensible en América Latina donde todos los paises comparten idioma; pero en Europa el cambio de un país a otro sí es palpable. El idioma es una barrera que debe ser superada.
El año 2050 puede que empiece con una Tierra devastada, con graves catástrofes ecológicas y guerras por los recursos. O no, la otra cara de la moneda es un mundo que coge lo mejor de películas como “Yo Robot”, “Regreso al Futuro”, “Inteligencia Artificial”, “El sexto día” o “Minority Report”. El hombre tendrá que trabajar menos, y el conocimiento será público y libre. El ocio será constructivo y los amigos serán nuestra patria (;)).
Haciendo el ejercicio contrario, ¿qué ha cambiado desde 1960 hasta ahora? La gente ya no lleva el bocadillo en papel de periódico: para mí los cambios más drásticos ha sido el plástico e internet, sin lugar a dudas. El resto de cosas siguen siendo parecidas, con más aporte de diseñadores y evolución de materiales y costumbres, pero básicamente el mismo.
¿Qué nos deparará el año 2050? ¿La tercera república? ¿La cuarta? ¿O ser el estado número 76 de los Estados Unidos de América? Lo que sí sé es que para ese año el 90% de los padres de hoy estén muertos. A veces me planteo si realmente la sociedad de 15-30 años de hoy en día está preparada para llevar las riendas del mundo. Me alivia pensar que hace 40 años mis padres pensaron lo mismo.
Por cierto, Leonor me encanta como nombre.