Pinceladas de una vida
En El País de hoy hay una entrevista a Iñaki Gabilondo que me ha gustado bastante, dejo algunos retazos que me han gustado:
“A los 15 años o por ahí descubrí que no todo el mundo tenía las mismas sensaciones. Me acuerdo de una anécdota. (…) les decía: “¿A que algún día nos vamos a morir?”, y ahí cambiaba la cosa, no querían responder, se evadían,”
“En Sevilla, yo descubrí el paganismo. En Euskadi siempre hemos tenido una mirada religiosa sobre las cosas; por eso en Sevilla descubrí todo lo contrario, el estallido de las cosas, (…) Me fascinó la Semana Santa, los fogonazos de vitalidad, la realidad individualizada.”
“Es lo que me molesta del PP, porque con la alarma hacen daño. Saben por las cosas que hemos pasado y que nada va a destrozarse; que España, ni se rompe, ni se deja de romper. Hay cosas muy serias que están pasando: la regularización de inmigrantes, el matrimonio de homosexuales, y no están ayudando a nadie a comprender su complejidad. En vez de a la pedagogía, recurren al amedrentamiento. Eso, con efectos especiales, para mantener a la gente muerta de miedo.”
“Tienes que entender antes de decir buenos días, yo necesito entender, y en eso se me pasa el tiempo”
“Nosotros apostamos por la autenticidad en la comunicación más que por la brillantez del espectáculo.”
“Pues debes empezar por preguntarte: ¿por qué soy yo el que hablo por la radio y no otro? ¿Cómo te aseguras de que no eres un impostor? Cuando sabes que nunca has dicho nada que no sientas.”
“Sí saber las cosas: que vienen inmigrantes, qué es el Ramadán. Profesionalidad. No sé qué es, pero es lo único que me preocupa. Y me he empezado a preocupar más cuando eres más mayor que la media, tienes más dinero que la media.”
“Yo veo a un tío al que no le gusta comer y, no sé, es como si viera de repente a alguien con tres orejas. Hasta muy mayor no me encontré a uno que no le gustaba comer, y fue como cuando Felipe González, mientras era presidente del Gobierno, me dijo que hacía años que no había ido al cine. Para mí fue como si hubiera visto volar un burro.”
¡Parece que he pegado mucho texto, pero es que la entrevista es muy larga! Y qué mejor que acabar con la primera pregunta de la entrevista, sobre un tema que me apasiona; le pregunta si es verdad que todos los días ve amanecer en la terraza de la cadena SER:
“Todos los días. Hago apostolado, se lo pido a todo el equipo; algunos me hacen caso, otros no. Les digo: “Éste es el último amanecer de hoy, es la única posibilidad que tenéis de verlo”. Me sirve para tener conciencia de lo que es cada día, porque luego nosotros trabajamos con los elementos de cada jornada.”
Digo que me apasiona porque, las veces que fui de público a Gomaespuma y a No Somos Nadie, me impresionó la terraza a la que se refiere: un pasillo, un sofá, dos máquinas de bebida y una de comida, y un grandioso ventanal en el que se ve, desde un octavo piso de la Gran Vía, todo Madrid hacia el norte… Desde las casas de la calle Fuencarral como pintadas con una brocha hasta el cuadro que resulta de la Sierra de Madrid, pasando por la enredadera sobre reja invisible que es la zona de rascacielos de Castellana norte.