Música
Me gusta la música. Últimamente después de comer, algunos días, se crean en las mesas de la cafetería de la facultad conversaciones y discusiones muy interesantes. El otro día hablamos sobre música, sobre si estamos estancados no en música, sino en la forma de comercializarla. Mi opinión es que la forma actual de comercio (radio-fórmula, lista de tops, anuncios en tv, multinacionales haciendo filtros de calidad, etc…) no provée la libertad necesaria al consumidor como para que, sin necesidad de dedicarle una alta cantidad de tiempo, pueda crear sus propios gustos.
Me parece que Internet va a cambiar muchas cosas, entre otras esa. A día de hoy es una forma magnífica para crear presión política, para organizarse, para distribuir ideas y lo que es más importante: debatirlas.
El otro día me puse a escuchar Radio Reloj, la radio que emite noticias 24/7. Como todos los medios de comunicación que siguen las reglas de un régimen más o menos rígido las frases (como eslóganes) se repiten constantemente. Realmente muchas de las ideas de fondo que hay en ese país me parecen magníficas y la de “La guerra de ideas” me parece de un fondo poético magnífico.
Volviendo a la música, los formatos de audio digital han evolucionado un montón, así como las herramientas para utilizarlos. Recuerdo como tardaba casi 30 minutos en comprimir en MP3 un disco de música. Un día hice una comparativa y llegué a la conclusión de que ahora tardo lo mismo en comprimir un disco que antes una canción, en el mismo ordenador.
Además, hoy existe OGG que, con con la mitad de bitrate que un MP3, suena, como mínimo, igual.
El mundo avanza que es una barbaridad… ¿Nos hace envejecer la tecnología? A mí me hace sentir que todos los días tengo 16 años.
¿Imagen del día? Ésta. El Monkey Island 1 corriendo bajo el emulador ScummVM sobre una consola portátil GP32… Bendita tecnología. Más imágenes sobre esto aquí.